Estrategia urbana


La estrategia para los espacios de enseñanza surge de los caminos peatonales diarios que siguen los estudiantes. La ruta tomada todos los días desde la estación hasta la Academia se convierte en el hilo conductor de nuestra propuesta.

Como estrategia urbana para resolver el estado de fragmentación del campus, se propone un edificio que establece una nueva relación entre los edificios existentes. A través de estos “hilos invisibles'' se consolida el campus de la Academia como una unidad, y se crea un nuevo enlace con la estructura urbana actual.  

El proyecto se configura en respuesta a la entrada de la ciudad, estableciéndose una relación con la base de la Iglesia y del Teatro dell'Architettura. De esta manera, el proyecto se convierte en un nuevo elemento que cose la ciudad respetando el valor cultural del palacio Turconi. No pretende imponer una forma predeterminada o un volumen autónomo, sino más bien, tomar la propia geometría del lugar.


Estrategia de asentamiento

El nuevo edificio se aprovecha del fuerte desnivel del lugar y lo convierte en una doble circulación perimetral que se eleva a los lados del proyecto y enlaza las diferentes áreas de los alrededores.

De esta manera, los espacios intersticiales resultantes se convierten en espacios de reuniones espontáneas y relación, convirtiéndose en una parte fundamental de la vida del campus.

La propuesta sigue la geometría del lugar, que se configura como un perímetro irregular que alberga en su interior un gran espacio regular: el espacio del taller.

Por encima de la base, el plano horizontal del techo se eleva por encima de la altura máxima del terreno y plantea una serie de arcadas que crean una banda perimetral de luz que ilumina el espacio central de forma homogénea.


Aprendizaje por ósmosis
“Estrategia tipológica. Biblioteca-vida”

El taller se presenta como un gran espacio de aprendizaje abierto, referenciándose en la tipología “biblioteca-sala de estar” típica del Renacimiento. A partir de la invención de la imprenta, surgen nuevas necesidades de almacenamiento. La biblioteca, por tanto, se convierte en un área grande de conocimientos en la que los libros están dispuestos a lo largo de la pared perimetral en grandes bastidores. De este modo, se crea una perspectiva que permite la visibilidad de toda la colección.

La Academia de Mendrisio, conocida por la atención que se presta a la obra material y al modelado, dota a los estudiantes que se encuentran en el primer año, de un espacio de taller donde pueden mostrar su identidad y su historia. Los mejores modelos realizados en los últimos años se exhiben en el perímetro del entrepiso; mientras que abajo, los estudiantes de primer año, trabajan y exponen sus obras. De esta manera, los estudiantes trabajan en estrecho contacto diario con obras que son una fuente de referencia constante, y así, se promueve el "aprendizaje por ósmosis."


Espacio único

Este tipo de aprendizaje es la base conceptual de la propuesta: un único gran espacio central dividido por los distintos talleres. La cohabitación favorece un aprendizaje de contacto, la armonía y el intercambio mutuo entre todos los alumnos del primer año.


Espacio público y conexiones

La zona exterior resuelve las conexiones y se convierte en un espacio para el intercambio y la ampliación de las actividades académicas.

El nivel inferior emerge como una gran plaza que conecta el vestíbulo de acceso del edificio, la entrada del hospital y el camino a la planta superior.

A través de la escalera principal se conecta el edificio con el Teatro dell’Architetture, que se presenta como un elemento de circulación principal del campus. La conexión con el palacio Turconi, en el interior del nuevo edificio, se lleva a cabo en el nivel -1.

Como consecuencia, desde los espacios públicos de la parte superior se puede percibir la actividad dentro del taller.